El tagoror es el nombre guanche del lugar en el cual se celebraban las reuniones de los antiguos habitantes de las islas, un lugar de consulta donde se reunían a conversar en asamblea. Su etimología también lo vincula con los cercados para animales.
Se propone la creación de un espacio para el encuentro entre humanos y no humanos, un lugar para sentarse y observar, un emplazamiento que facilite el diálogo y la escucha. Con esta finalidad, se crearán una serie de asientos modulares que inviten al encuentro y a lo colectivo. Y junto a estos, se situarán varias estructuras troncocónicas que sirvan de refugio para diferentes especies de insectos y animales.
La realización de estas estructuras modulares se realizará a partir de un proceso de experimentación con diversos materiales naturales del lugar: tierras, cañas, pinocha, badana y fibras vegetales. Se plantea abrir un proceso participativo abierto al alumnado de la Facultad de Bellas Artes de Tenerife y a cualquier persona interesada en la bioconstrucción, los procesos artesanales o el arte contemporáneo, durante la celebración del Foro de Mujer Rural en Tenerife.
Su instalación y realización en un entorno urbano como el exterior del TEA Tenerife, Espacio de las Artes, pretende iniciar un diálogo con la arquitectura contemporánea, introduciendo en este contexto, la importancia de la creación de lugares y espacios para el encuentro, no sólo para humanos, sino también con los otros seres con los que compartimos el planeta. Las piezas de la instalación serán modulares, por lo que después del periodo expositivo de este proyecto, se podrán instalar definitivamente en un entorno natural, para que cumplan con su función de lugar de encuentro y refugios de biodiversidad.